Toyota Motor planea inscribir un vehículo propulsado por hidrógeno líquido en las carreras de resistencia de 2023 como parte de su esfuerzo por producir coches propulsados por este combustible respetuoso con el medio ambiente y hacerlos comercialmente viables.
Según una nota publicada en Japan Times, para los fabricantes de automóviles, la presión está en proporcionar sustitutos sostenibles para los vehículos de gasolina, que el gobierno japonés pretende eliminar de las ventas de coches nuevos para 2035 como parte de su impulso hacia una sociedad neutra en carbono para 2050.
Al someter el vehículo de hidrógeno líquido a carreras de resistencia, Toyota espera mejorar la funcionalidad de la tecnología naciente y abordar algunos de sus retos, como mantener el hidrógeno líquido a 253 grados Celsius bajo cero.
El uso de hidrógeno en estado líquido en lugar de gaseoso duplicaría el kilometraje del vehículo y permitiría utilizar estaciones de servicio de hidrógeno más pequeñas.
En septiembre de 2022, la empresa creó un equipo de unos 30 especialistas para trabajar en el desarrollo de un vehículo comercialmente viable propulsado por un motor de hidrógeno, y entre las cuestiones que se le han encomendado está la de garantizar que el vehículo pueda funcionar a temperaturas bajo cero.
«Hemos dado un pequeño paso desde las pruebas de la tecnología hacia un producto que pueda fabricarse en serie», declaró Koji Sato, director de marca de Toyota.
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Pruebas de viabilidad
Toyota está ampliando sus esfuerzos de desarrollo y estudia la posibilidad de utilizar grandes depósitos de hidrógeno gaseoso en vehículos comerciales y de hidrógeno líquido en turismos. Los depósitos de combustible líquido tienen una forma más flexible y son más ligeros que los de hidrógeno gaseoso.
La empresa japonesa ya ha utilizado las carreras de resistencia para acelerar la viabilidad del combustible de hidrógeno. En mayo de 2021 estrenó un vehículo equipado con un motor de combustión alimentado por hidrógeno en una carrera de 24 horas en el Fuji International Speedway de la prefectura de Shizuoka.
En su aparición inaugural, el Toyota Corolla especialmente adaptado y alimentado por hidrógeno gaseoso fue pilotado por varios pilotos, entre ellos el presidente de Toyota, Akio Toyoda, y corrió durante unas 11 horas y 54 minutos. Durante las aproximadamente 12 horas restantes, el vehículo pasó unas ocho horas en reparaciones y cuatro horas repostando.
En una carrera de resistencia celebrada el pasado noviembre, Toyota afirmó haber mejorado la potencia del motor en 24% y su autonomía en torno a 30%. También consiguió reducir los casos de combustión anómala causante de incendios en el motor, disminuyéndolos en más de la mitad en comparación con el pasado mes de marzo.
El vehículo de hidrógeno líquido del fabricante empezó a funcionar en pruebas a finales de octubre.
Redacción | Antonio Vilela
