La Unión Europea (UE) se comprometió a mediados de la semana pasada a invertir 2.000 millones de euros en hidrógeno en Brasil como parte de su programa de inversiones Global Gateway, aunque no aclaró el calendario de inversiones ni cuándo podrían empezar a desplegarse.
Las inversiones de 2.000 millones de euros en la industria brasileña del hidrógeno formarían parte del programa de 300.000 millones de euros Global Gateway de la UE, la respuesta del bloque de 27 países a la iniciativa china Belt and Road, conocida dentro de China como One Belt One Road.
Ambos programas pretenden ampliar las zonas de influencia de la UE y China a escala mundial invirtiendo en infraestructuras.
Ursula Von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, viajó a Brasilia para reunirse con el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, en momentos en que la UE y Brasil mejoran su relación tras el gobierno de Jair Bolsonaro.
Von der Leyen dijo que los 2.000 millones de euros comprometidos para el sector del hidrógeno de Brasil formarían parte de un paquete más amplio de 10.000 millones de euros para otras inversiones en energías limpias en América Latina y el Caribe.
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Opinan los protagonistas
La presidenta de la Comisión Europea destacó el «potencial ilimitado» de Brasil en materia de energías renovables y, en concreto, de hidrógeno verde, que podría producirse en el país de forma «mucho más barata» que el hidrógeno producido a partir de fuentes no renovables.
«En otras palabras, estamos dispuestos a financiar, por ejemplo, la gestión sostenible de los bosques, las cadenas de suministro locales y, por supuesto, infraestructuras de energías limpias como la producción de hidrógeno«, declaró.
«Queremos una asociación a largo plazo, no una solución rápida. Ustedes están construyendo ahora tres puertos que permitirían a Brasil exportar hidrógeno limpio al mundo. Trabajemos juntos en esto. Porque los europeos nos hemos fijado el objetivo de importar 10 millones de toneladas de hidrógeno renovable cada año de aquí a 2030«, agregó Von der Leyen.
«Hay hasta 2.000 millones de euros esperando a ser invertidos ahora mismo en energías renovables y eficiencia energética. Juntos podemos construir un mercado transatlántico de hidrógeno limpio como socios fiables e iguales. En otras palabras, unamos nuestras fuerzas para salvar el planeta y hacer crecer nuestras economías».
La UE también ha prometido donar 20 millones de euros para el Fondo Amazonia, que pretende acabar con la deforestación para 2030, tal como se comprometió Brasil al firmar el Acuerdo de París de 2015.
En 2025, la ciudad brasileña de Belem acogerá la 30ª Conferencia de las Partes (COP30) de la ONU sobre el cambio climático.
Aclaración: Retransmite el párrafo 13
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