La Empresa Nacional del Petróleo de Chile (ENAP) informó que el proyecto de planta de hidrógeno verde registra un avance físico de más de 70% y mantiene su calendario para iniciar pruebas operativas y arranque comercial a inicios de 2026.
El anuncio consolida al proyecto como uno de los demostradores industriales más relevantes del país en la transición hacia vectores energéticos de bajas emisiones.
ENAP comunicó este mes que las obras civiles y el montaje de módulos críticos se encuentran mayoritariamente ejecutados, alcanzando un progreso global del 72% sobre el avance previsto en el cronograma del proyecto.
Según la compañía, durante las próximas semanas se concentrarán los trabajos de interconexión eléctrica, instalación de sistemas de almacenamiento y pruebas de integridad de tuberías y compresores, con la meta de completar la puesta en servicio inicial y comenzar las pruebas de rendimiento a principios de 2026.
ENAP señaló que la fase de comisionamiento incluirá ensayos de seguridad, verificación de controles y certificación de procesos antes de la entrega de las primeras toneladas de hidrógeno.
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Integración energética
ENAP diseñó la planta para operar con suministro de energía proveniente de fuentes renovables con el fin de garantizar baja intensidad de carbono en la producción de hidrógeno.
El proyecto contempla la integración con generación eólica y otras fuentes renovables disponibles en la zona sur austral, así como sistemas de gestión de la demanda que permitan operar electrolizadores en modos flexibles ante la variabilidad de la generación renovable.
La compañía ha enfatizado la importancia de certificar el origen renovable de la energía utilizada en la producción para asegurar el valor ambiental del combustible producido.

El hidrógeno producido en la planta está concebido para servir como demostrador tecnológico y como insumo para aplicaciones industriales, movilidad y posibles rutas de valor agregado como combustibles sintéticos.
ENAP destacó que el proyecto permitirá validar cadenas de suministro, protocolos de transporte y almacenamiento, y modelos de negocio orientados a usos portuarios, industriales y de transporte pesado, contribuyendo a la formación de capacidades técnicas y operativas necesarias para escalados posteriores en la región.
Impacto para la política energética
El avance del proyecto de ENAP es una señal relevante para los actores del ecosistema energético nacional y regional porque provee un caso operativo concreto para probar marcos regulatorios, mecanismos de certificación y requisitos técnicos que deben acompañar la expansión del hidrógeno verde.
La compañía indicó que el demostrador permitirá generar aprendizajes sobre costos de producción, eficiencia operativa y necesidades de infraestructura logística, información que será de interés para autoridades, reguladores e inversores en la formulación de políticas y en la estructuración de futuros proyectos de mayor escala.
Los hitos inmediatos anunciados por ENAP incluyen la finalización del montaje de equipos críticos, la ejecución de pruebas de comisionamiento y la obtención de certificaciones de seguridad y ambientales necesarias para el arranque.
ENAP se comprometió a publicar informes de avance y resultados de las pruebas iniciales conforme se completen las etapas de puesta en servicio, facilitando así información técnica y operativa para el sector y la sociedad.
El inicio de operaciones a principios de 2026 marcará el paso del proyecto desde la fase demostradora hacia la generación de datos reales sobre la viabilidad técnica y económica del hidrógeno verde en contextos industriales chilenos.














