La asociación entre Shell, Hytron, Raízen, SENAI CETIQT y la Universidad de São Paulo (USP) para probar la viabilidad del hidrógeno a partir del etanol anunció el inicio de la construcción de la primera estación de servicio experimental del mundo que adoptará la tecnología de reformado a vapor de biocombustibles.
La planta piloto ocupará una superficie de 425 metros cuadrados y tendrá capacidad para producir 4,5 kg de hidrógeno por hora, destinados al abastecimiento de hasta tres autobuses y un vehículo ligero.
El proyecto de Investigación y Desarrollo cuenta con una inversión total de R$ 50 millones de Shell Brasil, con recursos de la cláusula RD&I de la ANP.
Para probar el suministro, el grupo firmó un memorando de entendimiento con Toyota, que proporcionará un vehículo para los estudios. La previsión es que la estación experimental esté operativa en el segundo semestre de 2024.
«El objetivo de este proyecto innovador es intentar demostrar que el etanol puede ser un vector para el hidrógeno renovable, aprovechando la logística existente en la industria. La tecnología podría ayudar a descarbonizar sectores que consumen energía a partir de combustibles fósiles», dijo el presidente de Shell Brasil, Cristiano Pinto da Costa.
También te puede interesar: Agora publica nuevo estudio vinculado a las estimaciones del costo nivelado de producción de hidrógeno
Reformado con vapor
En el conjunto de equipos que serán instalados en el lugar, habrá un reformador desarrollado y fabricado por Hytron, donde ocurrirá la conversión de etanol en hidrógeno a través de un proceso químico llamado reformado a vapor, cuando el etanol, sometido a temperaturas y presiones específicas, reacciona con el agua dentro de un reactor.
«Estamos reuniendo la tecnología pionera brasileña de Hytron para demostrar una solución disruptiva, donde el hidrógeno producido a partir del etanol desempeña un papel aún más relevante y de alto impacto en la transición energética del país y del mundo», señaló Daniel Lopes, director comercial de Hytron.
A lo largo del funcionamiento de la estación experimental, los investigadores validarán los cálculos sobre emisiones y costos del proceso de producción de hidrógeno, mientras que el etanol será suministrado por Raízen, empresa conjunta de Shell y Cosan.
Por su parte, el Instituto SENAI de Innovación en Biosintéticos y Fibras del SENAI CETIQT realizará simulaciones por computador para hacer más eficiente el equipo, identificando oportunidades de mejora y aumentando la tasa de conversión del etanol en hidrógeno renovable.
Pruebas
El hidrógeno producido en la estación alimentará los autobuses de la Empresa Metropolitana de Transportes Urbanos de São Paulo (EMTU/SP), que circularán exclusivamente dentro de la ciudad universitaria.
Para probar el rendimiento del hidrógeno, Toyota puso a disposición del proyecto el Mirai, el primer vehículo de hidrógeno comercializado a gran escala en el mundo, cuyas baterías se cargan a partir de la reacción química entre el hidrógeno y el oxígeno en la pila de combustible.
Rafael Chang, presidente de Toyota do Brasil, afirma que el proyecto es el primer paso de la empresa para probar el uso de esta nueva tecnología en el país. «Estamos interesados y dispuestos a trabajar junto con el gobierno del estado para permitir el transporte sostenible utilizando hidrógeno renovable a partir de etanol».
Si deseas leer el comunicado oficial, haz clic aquí