El gobierno del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva presentó recientemente un proyecto de ley para aumentar la proporción de etanol en las mezclas de gasolina, y establecer objetivos de emisiones para el sector de la aviación, en un intento por acelerar la transición energética y eliminar los combustibles fósiles.
El llamado programa Combustible del Futuro se presentó oficialmente a fines de la semana pasada en la capital, Brasilia, pero aún necesita la aprobación del Congreso para convertirse en ley.
De aprobarse, Brasil adoptaría formalmente una normativa que establecería objetivos para el uso de combustible de aviación sostenible (SAF) y gasóleo ecológico con el fin de apoyar sus objetivos de alcanzar las emisiones netas cero en 2050.
La propuesta también incluye el debatido aumento de la mezcla de gasóleo anhidro en la gasolina de 27,5 a 30 puntos porcentuales.
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Nuevos cambios
«Brasil puede llegar a ser tan importante, si no más, para los biocombustibles como Oriente Medio lo es para el crudo», declaró Lula, y también aludió a reuniones oficiales próximas con representantes de la industria en Estados Unidos y en Alemania a finales de año para tratar asuntos relacionados con los combustibles renovables.
Por su parte, el ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira, dijo que la iniciativa es un resultado directo de los esfuerzos de la administración para la transición energética mundial. «Brasil será un proveedor de soluciones bajas en carbono para otros países», afirmó.
Algunos de los cambios propuestos son los siguientes:
- Captura y almacenamiento de carbono (CAC): crea el marco legal para desarrollar proyectos emergentes de captura de carbono, que serían regulados por la agencia de hidrocarburos ANP.
- Gasóleo verde o renovable: fomenta un programa nacional para incorporar el gasóleo verde al parque de combustibles del país, con un mandato de mezcla aún por definir por el Consejo Nacional de Política Energética (CNPE).
- E-combustibles: establece normas que permitirán crear una industria nacional en el sector de los e-combustibles, que comprende alternativas sintéticas a los combustibles fósiles a partir de hidrógeno y CO2.
- Mezcla de etanol y gasolina: aumenta la mezcla máxima de etanol anhidro (puro) en la gasolina de 27,5% a 30%.
- SAF: establece objetivos de emisiones para las aerolíneas, fomentando el uso creciente de SAF, con el objetivo de alcanzar una reducción de emisiones de 1pc para las aerolíneas en 2027 y de 10pc en 2037.
Según información de Argus, el paquete de medidas podría suponer cierto alivio para el sector del etanol, ya que los productores se enfrentan a una mayor disponibilidad de biocombustible y a la contracción del mercado de consumo.