La Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés) señala en su últimoinformeque los mercados de gas natural seguirán tensos hasta bien entrado el año que viene, ya que Rusia sigue reduciendo los flujos de gas natural hacia Europa, lo que ha llevado los precios internacionales a nuevos máximos, ha interrumpido los flujos comerciales y provocado escasez de combustible.
Según el último informe trimestral de la IEA sobre el mercado del gas, se espera que el consumo mundial de gas disminuya 0,8% en 2022 como resultado de una contracción récord del 10% en Europa y una demanda sin cambios en la región de Asia-Pacífico.
Para el próximo año, se prevé que el consumo mundial de gas crezca solo 0,4%. Sin embargo, esta previsión está sujeta a un alto nivel de incertidumbre, sobre todo en lo que respecta a las futuras acciones de Rusia y a las repercusiones económicas de los altos precios sostenidos de la energía.
El corte del suministro de gas a Europa por parte de Rusia como represalia a las sanciones ha agudizado las tensiones del mercado y la incertidumbre de cara al próximo invierno, no solo para Europa sino también para todos los mercados que dependen del mismo pool de suministro de gas natural licuado (GNL), indica el informe.
«Las perspectivas de los mercados del gas siguen siendo turbias, entre otras cosas por la conducta imprudente e imprevisible de Rusia, que ha destrozado su reputación de proveedor fiable. Pero todos los indicios apuntan a que los mercados seguirán muy ajustados hasta bien entrado el año 2023», dijo Keisuke Sadamori, director de Mercados Energéticos y Seguridad de la IEA.
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Precios récord
El informe muestra que los precios del gas natural en Europa y del GNL al contado en Asia se dispararon hasta alcanzar máximos históricos en el tercer trimestre de 2022, lo que provocó una reducción de la demanda de gas y el cambio a otros combustibles para la generación de energía.
El consumo de gas en Europa se redujo en más de 10% en los primeros ocho meses de este año en comparación con el mismo periodo de 2021, impulsado por una caída del 15% en el sector industrial, ya que las fábricas redujeron su producción.
La demanda de gas natural en China y Japón prácticamente no varió en ese mismo periodo, mientras que se contrajo en India y Corea. Se prevé que la demanda china de gas aumente menos del 2% este año, su menor tasa de crecimiento anual desde principios de la década de 1990.
Mientras tanto, los precios del gas natural en Estados Unidos alcanzaron sus niveles más altos del verano desde 2008, aunque Norteamérica fue una de las pocas regiones del mundo donde la demanda aumentó, apoyada por la demanda de la generación de energía, dice la IEA en el informe.
El aumento de la demanda de GNL en Europa, 65% más en los ocho primeros meses de 2022 que el año anterior, ha alejado el suministro de los compradores tradicionales de la región de Asia-Pacífico, donde la demanda se redujo 7% en el mismo periodo como consecuencia de los altos precios, el clima templado y los continuos cierres de Covid-19 en China.
La IEA prevé que las importaciones de GNL de Europa aumenten en más de 60.000 millones de metros cúbicos (bcm) este año, es decir, más del doble de la cantidad de adiciones de capacidad de exportación de GNL a nivel mundial, manteniendo el comercio internacional de GNL bajo una fuerte presión a corto y medio plazo.
Esto implica que las importaciones de GNL de Asia seguirán siendo inferiores a las del año pasado durante el resto de 2022.
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Redacción | Antonio Vilela