El iridio es uno de los elementos más raros que se encuentran en la naturaleza y solo representa el 0,00000003% del peso de la corteza terrestre, según elMuseo de Historia Natural del Reino Unido,pero tiene una serie de usos, sobre todo en aleaciones de alto rendimiento. Su producción mundial es de tan solo siete toneladas al año.
Según unreportede la consultora, los catalizadores de iridio y platino hoy en día suelen tener un 65% de iridio y un 35% de platino, son esenciales para lo que actualmente es la tecnología de electrolizadores más popular, conocida como sistema de membrana de intercambio de protones (PEM, por sus siglas en inglés).
Las perspectivas de la demanda de iridio son muy inciertas, ya que reflejan un abanico de posibles resultados para las tasas de crecimiento y las opciones tecnológicas de los productores de hidrógeno, pero los planes de las empresas para los proyectos de hidrógeno verde sugieren que habrá un fuerte aumento de la demanda en la próxima década.
Wood Mackenzie indica que solo el cumplimiento de los objetivos de la Unión Europea en materia de producción de hidrógeno verde podría dar lugar en 2030 a una demanda de iridio para electrolizadores varias veces superior a la oferta mundial actual.
También te puede interesar:Nuevo catalizador de hierro podría hacer asequibles las pilas de combustible de hidrógeno
Reservas y suministro
El suministro mundial de iridio está actualmente dominado por Sudáfrica, como subproducto de la producción de platino y paladio. En 2018, Sudáfrica representó el 87% de la producción mundial, con otro 8% procedente de Zimbabue y 3% de Rusia y Canadá, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
Sudáfrica también tiene la gran parte de las reservas mundiales de los metales del grupo del platino (MGP): alrededor del 91%, seguido por Rusia con alrededor del 6%, Zimbabue con alrededor del 2% y Estados Unidos con alrededor del 1%, según el USGS.
Debido a ello, Ed Crooks, vicepresidente de Wood Mackenzie, indica que la dependencia de un puñado de fuentes de materiales críticos para la energía con bajas emisiones de carbono es diferente en algunos aspectos de la dependencia de los combustibles fósiles.
En este sentido, explica que si se cortara el flujo de MGP, los electrolizadores ya en funcionamiento podrían seguir produciendo hidrógeno, pero la industria del hidrógeno verde aspira a crecer rápidamente, y una cadena de suministro de materiales arraigada casi por completo en el sur de África y Rusia parece una vulnerabilidad crítica.
Perspectivas y consecuencias
Los analistas de Wood Mackenzie han modelado las perspectivas de la demanda de MGP para dar una idea del impacto potencial de la industria del hidrógeno verde, con un probable aumento de la demanda de platino que parece manejable, pero el iridio podría ser un reto mucho mayor.
La producción mundial total de iridio este año será de unas 255.000 onzas, afirma Roger Emslie, principal consultor de metales y minería de Wood Mackenzie. En un escenario elevado, basado en sus previsiones de producción de hidrógeno verde y en las cargas actuales de los catalizadores, la demanda de iridio para los electrolizadores PEM podría ser varias veces superior para 2030.
Además, otra consecuencia es una posible disminución de la demanda de catalizadores PGM, y que aumente el uso de dos alternativas a los sistemas PEM: los electrolizadores alcalinos y de óxido sólido.
La mayoría de los proyectos de hidrógeno verde que han declarado opciones tecnológicas hasta ahora utilizan sistemas PEM o alcalinos, y el óxido sólido representa solo una pequeña minoría, aunque se espera que su cuota crezca con el tiempo. Este cambio frenaría la demanda de catalizadores.
Por otra parte, los fabricantes también podrían mejorar la eficiencia de los catalizadores, reduciendo el metal necesario para un determinado volumen de producción de hidrógeno.
El informe de la consultora indica que es posible que el hidrógeno verde crezca más lentamente de lo previsto, pero la dinámica del mercado indica claramente que el iridio es un problema que los productores de hidrógeno, los consumidores y los responsables políticos deben tener en cuenta.
Si deseas leer el reporte completo, haz clic aquí
Redacción | Antonio Vilela