El nuevo informe «ICS Barometer Report 2023-2024» publicado por la Cámara Naviera Internacional (ICS) ilustra y examina las principales áreas de preocupación para los armadores, los directivos y el sector.
Según la ICS, el proteccionismo representa un riesgo creciente para los responsables del transporte marítimo, impulsado por la inestabilidad geopolítica, las preocupaciones nacionales por la seguridad energética, las crisis económicas mundiales y regionales, y los incentivos a la fabricación impulsados por los gobiernos que favorecen la producción local, según muestra un informe reciente.
Las áreas de preocupación para los encuestados incluyen el reciente aumento de la inestabilidad geopolítica (un multiplicador del riesgo), los ataques físicos maliciosos y los ciberataques (por parte de actores estatales y no estatales), así como las actualizaciones de los entornos regulatorios globales y/o regionales, y la disponibilidad de combustibles e infraestructuras que impulsan la descarbonización.
«Nos encontramos en un periodo de profunda transformación, marcado por la descarbonización, el aumento de los riesgos para la seguridad y la evolución de la normativa. Lo que muestra esta valiosa perspectiva basada en datos es que la política y la claridad son clave», comentó Emanuele Grimaldi, presidente de la Cámara Naviera Internacional.
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Detalles del reporte de ICS
El informe señala que la pandemia, los esfuerzos de seguridad energética y comercial para gestionar la agitación geopolítica y cumplir los objetivos de descarbonización, y las políticas económicas que favorecen la fabricación y el consumo locales han provocado un aumento significativo y alarmante del proteccionismo en todo el mundo.
Se destacó que, a medida que los aranceles recientemente impuestos o suavizados afecten a las relaciones comerciales, ya sea fragmentando patrones antiguos o creando otros nuevos, las rutas comerciales seguirán cambiando, con consecuencias costosas y complejas para el transporte marítimo y la economía mundial en general.
El informe hace un seguimiento del progreso de nuestra industria a través de los recientes aumentos de confianza, al tiempo que señala los puntos de presión clave, como la disponibilidad de financiación pública para iniciativas ecológicas y el impacto de las medidas basadas en el mercado, que siguen requiriendo un mayor esfuerzo de colaboración entre los líderes de la industria, los organismos gubernamentales y los socios internacionales para abordarlos.
Además, la ICS señala que la normativa sigue siendo el factor más importante que afecta a las operaciones empresariales, lo que no solo refuerza la necesidad de una supervisión reglamentaria clara y sostenible para establecer unas condiciones equitativas, sino que también impulsa la transparencia para los inversores y otras partes interesadas al existir unos parámetros claramente definidos más allá de los adoptados voluntariamente.
Algunas conclusiones
La solución a estos retos podría ser la creación de una vía oficial escalonada hacia el cero neto, que probablemente reduciría la fragmentación de los enfoques de descarbonización. Hasta ahora, los enfoques variaban entre regiones y sectores individuales en función de las políticas públicas y las ambiciones de las empresas.
Las conclusiones del informe indican que la disponibilidad de tripulaciones y personal capacitado para determinadas funciones sigue siendo una preocupación constante, con el potencial de afectar aún más a las operaciones, a medida que el aumento de la inestabilidad geopolítica afecte a los esfuerzos de contratación y retención en los próximos años.
El informe de la ICS también llama la atención sobre el mercado de los combustibles alternativos, en el que el metanol y la energía nuclear han registrado un aumento significativo del interés por parte de los encuestados del sector.
El metanol y el gas natural licuado (GNL) siguen dominando la composición de la flota mundial, mientras que el amoníaco y el hidrógeno necesitan más apoyo para convertirse en opciones viables en esta década.