StreamTec Solutions, empresa formada a partir del equipo de gestión de los gasoductos Nord Stream, realizó una investigación sobre el estado actual del Nord Stream 2, así como sobre las opciones de futuro, señalando que podría reutilizarse para el transporte de hidrógeno.
El Nord Stream 2, cuya construcción finalizó en 2021, consta de dos ramales paralelos, cada uno de 1.230 kilómetros de longitud y 1,2 metros de diámetro, que atraviesan el mar Báltico desde la bahía de Narva (Rusia) hasta Lubmin (Alemania).
Descrito como el gasoducto marino más largo y potente jamás construido y diseñado para transportar 55.000 millones de metros cúbicos de gas al año, el gasoducto estaba presurizado, pero nunca había transportado gas de Rusia a Alemania.
Concretamente, el 26 de septiembre de 2022 se produjeron graves daños causados por explosivos en la línea A del gasoducto, en la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Dinamarca y Suecia, en el mar Báltico. Al mismo tiempo, los dos gasoductos Nord Stream 1 sufrieron roturas por explosivos.
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Factibilidad técnica
La empresa suiza StreamTec Solutions llevó a cabo un estudio técnico sobre el estado actual y las opciones adicionales para el uso futuro del gasoducto Nord Stream 2 y elaboró un informe basado en información de dominio público.
Los daños en la línea A no son tan graves como se pensaba en un principio, mientras que la línea B sigue intacta y podría reutilizarse sin reparaciones. Por su parte, Dinamarca concedió el mes pasado permiso a Nord Stream 2 AG para conservar el gasoducto Nord Stream 2.
«La línea A está rota en dos puntos cerca de la isla de Bornholm, a 80 kilómetros de distancia. Esta línea está ahora parcialmente llena de agua. Sin embargo, más del 90% del gasoducto no está inundado y sigue lleno de gas natural a baja presión», explicó Richard Taylor, director de Construcción Offshore y socio de StreamTec Solutions.
«La corrosión en el interior de las secciones inundadas de la tubería es mínima y no supone una amenaza para la integridad de la tubería, debido principalmente a los bajísimos niveles de oxígeno del Mar Báltico a esta profundidad y a que la temperatura del agua es lo suficientemente baja como para minimizar la corrosión inducida por microbios», agregó,
Según Taylor, es técnicamente factible reparar la línea A, ya que se dispone de las herramientas, el equipo y los conocimientos necesarios. Si se encuentra un caso de reutilización, reparar la tubería costaría bastante menos que construir una nueva, además de ser más respetuoso con el medio ambiente.
Posibilidades futuras
En cuanto al posible uso futuro del Nord Stream 2, una opción podría ser su reutilización para el transporte de hidrógeno, ya que el gasoducto y su acero son adecuados según los conocimientos actuales, pero también su reutilización para importar GNL a Lubmin a través de una terminal de regasificación en alta mar o su uso como instalación de almacenamiento de gas.
«Las opciones de reparación son técnicamente viables, y hay varios casos potenciales de reutilización que ofrecen ventajas comerciales significativas en comparación con la construcción de nuevas infraestructuras», señalóTaylor.
«Estos gasoductos podrían desempeñar un papel crucial en la descarbonización de Europa al proporcionar energía limpia y renovable con una huella ambiental relativamente pequeña para su reutilización», concluyó el experto.
StreamTec Solutions se formó a partir del equipo de gestión del proyecto Nord Stream 1, que finalizó en 2013.